Leyendo en un blog amigo una entrada sobre las pifias que suelen oírse al escuchar a los periodistas deportivos, me ha venido a la memoria ese genio de las ondas que es Jorge D'Alessandro. Cuando el ex ministro del Gobierno Aznar Francisco Álvarez-Cascos (ese al que retraron con un doberman en la campaña electoral del PSOE en el año 2000, ¿os acordáis...?) proclamó el fútbol como un elemento de interés general y una "conquista social" que Antena 3 emitiera un partido los lunes, el canal privado se acordó de este ex jugador y entrenador, el de la foto por si alguien no le conoce, para hacer los comentarios especializados.
Hay dos de sus perlas lingüísticas que se me quedaron grabadas a fuego. Recuerdo cuando en el lanzamiento de un penalti intentaba explicar, ante el asombro generalizado, cuál era el palo corto en esa jugada... Para quien no sepa de fútbol, lo del "palo corto" se utiliza para hablar del poste de la portería más cercano al punto desde el que se lanza el balón. Si el penalti se lanza justo en el centro del área, es decir, a la misma distancia tanto del palo derecho como del palo izquierda,... ¿cuál puede ser el palo corto...? Un misterio digno de Iker Jiménez, sin duda.
No recuerdo ya si fue en la misma retransmisión, días antes o días después, pero puedo garantizar que en aquel partido jugaba el Real Madrid. D'Alessandro aseguró que el equipo merengue estaba jugando con "un 4-4-2, con Dubovsky solo en punta". A ver, que yo me aclare... Cuatro defensas, cuatro centrocampistas y dos delanteros, ¿no? ¿Y entonces cómo es posible que uno de esos delanteros juegue solo en punta...? (Dubovsky era un buen jugador que provocó un enorme dolor en el fútbol español cuando se supo que murió al caer de un acantilado en Tailandia cuando estaba allí de vacaciones con su familia; entonces era jugador del Oviedo).
Alguien debería escribir un libro sólo con la cantidad de frases hechas, lugares comunes, estupideces sin sentido e incongruencias varias que se dicen en las retransmisiones deportivas. Yo no me siento con fuerzas para hacerlo porque a la tercera burrada estaría ya demasiado indignado como para seguir escribiendo...
4 comentarios:
Fernando Lázaro Carreter ya lo hizo en su libro "El dardo en la palabra", donde ponía a caldo a los periodistas en general, y a los especializados en información deportiva en particular.
El problema de comentaristas como D'Alessandro, que se pasan todo el partido criticando a uno u otro entrenador (o a ambos a la vez) es el siguiente: si tan sagaces son, ¿cómo es posible que no entrenen a ningún equipo? Y así, junto a D'Alessandro, podemos mencionar a otros como Míchel (me encantaba cuando decía "es importante sacar bien los corners", ¡no me digas!) o al inefable Juan Manuel Lillo, que al principio era una mezcla de Cruyff y Valdano con acento español, pero que al final acabó hundiendo a todos los equipos a los que entrenó.
Lázaro Carreter nunca lo citaba, pero a José María García le ponía verde de vez en cuando.
A mí se me quedó grabada una frase de Raúl García de Loza, ex-árbitro y no sé si ex-comentarista, que en una retransmisión de Onda Cero dio la siguiente "información":
-El jugador está en fuera de juego porque se encuentra en posición ilegal.
Pues eso, que si marcas es gol. :P
Yo lo del palo corto o palo largo sí que lo entiendo. Depende del pie con el que se lance el penalti.
Del Butano recuerdo, a bote pronto, una:
¿Y qué han practicado hoy los chicos de Díaz Miguel?
Han estado ensayando los tiros libre.
Muy bien. Así me gusta. Libertad de tiro.
Y Juanma Lillo es conocido como Juan Malillo.
No entrena a nadie pk estuvo en el atleti y les descendió. Yo a ese tío no lo contrato ni aunk me paguen
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