El último informe sobre la libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras es, como poco, chocante en lo que se refiere a su análisis de la situación en España. Este colectivo encuentra cinco aspectos analizables en la comunicación española. Y lo que más llama la atención es su alusión a ETA.
Para empezar, considera a la banda terrorista y criminal como una "organización independentista vasca". Años lleva luchando la sociedad española y todos sus gobiernos para que se deje de tachar a ETA como un grupo independentista y se diga lo que realmente es, pero por lo visto no hay forma de que algunos lo entiendan. Esa calificación sólo sirve para desacreditar cualquier conclusión a la que pueda llegar este informe sobre este aspecto. En todo caso, lo que dice el informe es que algunos profesionales "han tenido dificultades para hacer su trabajo a pesar del alto el fuego" y que "varias decenas de profesionales de la prensa siguen trabajando con protección, a cusa de las amenazas que les ha dirigido" ETA. Vaya novedad, por otra parte. Eso lo sabemos todos. Quizá hubiera sido necesario un análisis más contundente.
Un segundo aspecto que trata el informe está también relacionado con ETA, ya que habla de las medidas judiciales contra el diario Egunkaria. Según Reporteros Sin Fronteras, "no se ha podido demostrar que Egunkaria fuera un instrumento de ETA" y "eso no significa que vayan a dejarse sin efecto todas las diligencias en marcha contra el periódico en lengua vasca, que tiene otros dos sumarios abiertos". Estupendo, Reporteros Sin Fronteras pone en duda las medidas cautelares de un proceso judicial abierto. ¿Va a disculparse esta organización si resulta que el juez prueba al final que Egunkaria está directamente relacionado con ETA? Me parece queno... Una vez más, las palabras son muy fáciles de pronunciar y las consecuencias de las proclamas son nulas cuando éstas pueden revelarse equivocadas.
Otro de los problemas que señala el informa es la Ley Audiovisual catalana (no acabo de entender cómo se pueden equiparar las amenazas de ETA y la aprobación de una Ley, pero eso forma parte de otra discusión...). Según Reporteros Sin Fronteras, algunas disposiciones de esta Ley son restrictivas y amenazan la libertad de prensa. Esta alusión, por supuesto, ya ha servido a medios afines a la derecha para atacar a la Generalitat de Cataluña, por extensión al Gobierno español, y a colocar este aspecto del informe como titular de sus informaciones por encima de la vergonzosa calificación a ETA como "organización independentista vasca". Cada uno sabrá dónde cree que están los enemigos de la democracia y de la libertad.
Los otros dos aspectos que cita el informe en relación a España son la condena a Taysir Alony por su relación con Al Qaeda y la reapertura de la investigación judicial por el asesinato en Irak del cámara José Couso. Sobre este último punto, Reporteros Sin Fronteras se alegra de que se siga investigando y de que el Tribunal Supremo considere competente a la Justicia española para hacerlo.
A mi juicio, este informe de Reporteros Sin Fronteras supone un análisis un tanto sesgado de la libertad de prensa que hay en España. Son muchos más los problemas que acechan a los informadores y parece que nadie quiere hacerse eco de ellos. Para empezar, hubiera estado bien una reflexión sobre los motivos por los que el Estatuto del Periodista es uno de esos asuntos que va a eternizarse en el Parlamento sin que se llegue a conclusión alguna. A nadie se le ha ocurrido pensar en la precaria situación laboral de la amplia, de la inmensa mayoría de los periodistas: sueldos bajos, horarios infernales, presiones ideológico-políticas y escasa libertad para trabajar dentro de los propios medios. Eso sí que afecta a la libertad de prensa y, además, a la calidad de las informaciones que vemos, oímos y leemos.
Es descorazonador que la situación de los medios públicos (me viene a la cabeza Telemadrid, que ha sufrido huelgas, denuncias por parte de los sindicatos e incluso una investigación en curso en las instituciones europeas que seguramente se quedará en nada) no merezca más tratamiento que el análisis de la Ley catalana. Se podría hacer un análisis de la concesión de frecuencias de radio y televisión en las distintas comunidades autónomas para ver si realmente hay libertad de prensa. Se podría haber estudiado el monopolio de la televisión digital. Y seguro que hay otras muchas cuestiones que hubieran merecido unas líneas en este informe.
¿Para cuándo un informe más completo e independiente de la situación del periodismo en España?
1 comentario:
Estoy de acuerdo con la totalidad del texto pero quiero hacer hincapié en el tema del Estatuto del Periodista. Esto si que es URGENTE, porque un periodista lo primero que debe tener es seguridad y libertad para informar que es imprescindible para una sociedad avanzada y lo segundo que la remuneración sea digna y que no se esté explotando a becarios haciéndo la labor de un redactor (cuando deberían estar aprendiendo) por un sueldo de miseria que a veces no llega a los 300 euros al mes.
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