lunes, julio 21, 2008

Cómo valorar 100 días de un Gobierno

Esto de evaluar a un Gobierno parece una tarea fácil, pero no lo es, no, no os engañéis. Es uno de esos casos en los que las apariencias, sin duda, nos confunden a todos los mortales. Porque uno puede caer en el fatal error de pensar que lo suyo es mirar qué ha hecho el Gobierno, qué medidas ha aprobado, qué decisiones ha tomado, que posturas ha mantenido y hacer algo tan sencillo como evaluarlas, ¿no? Pues no, almas cándidas e inocentes, no... Lo importante a la hora de evaluar a un Gobierno es justo lo contrario. Hay que tener un absoluto desconocimiento de lo que ha hecho y dejado de hacer, y opinar en consecuencia. Si es evidente... Como que ahora va a hacer falta saber algo para romper las ideas preconcebidas, acabáramos...

Y yo, visto lo visto, qué queréis que os diga, ya paso de evaluar. ¿Para qué? Si cada cual ya se ha formado su opinión antes de empezar. Para el momento en que consiguiera decir "para mí, el Gobierno lo ha hecho..." ya todos tendrían una opinión formada. Formada e inamovible, claro. Vamos, que por lo visto no se puede ser socialista y criticar algo de lo que haga este Gobierno y no se puede ser popular y pensar que, aunque sea por casualidad, Zapatero y los suyos puedan haber acertado en algo. La crítica seria ha muerto, ¡viva la crítica seria! La autocrítica ha muerto, ¡viva la autocrítica!

Una vez enterrados los dos cadáveres, pensemos lo que han dicho los políticos de estos cien días. Por parte del PSOE, reconozco que sólo he escuchado a una persona evaluar al Gobierno (seguro que es por la modestia de no querer evaluarse uno mismo, seguro...). El portavoz en el Congreso y ex ministro de Interior y de Defensa, José Antonio Alonso, le ha puesto un notable al Ejecutivo. Pero, consciente de que es una tontería cada vez más sublime prestar atención a lo que dice un político sobre la gestión de los suyos, él mismo lo deja claro a continuación. "¿Qué te voy a decir yo?", le preguntó a un periodista que había acudido a pedirle esa nota. Alonso, al menos, sí dejó margen para la autocrítica. Mínimo margen, recordando que siempre se pueden mejorar cosas, pero al menos no piensa en el sobresaliente...

Cruzando la acera he oído a mucha más gente. A falta de silla gubernamental, bien vale un micrófono y salir por la tele, deben pensar por Génova. La nota más alta que le ha puesto al Gobierno un dirigente del PP creo que ha sido de un 2,5. Previsible, ¿verdad...? Mariano Rajoy, por una vez y sin que sirva de precedente, reaccionó con rapidez y cierta gracia. "No presentado", dijo. Por lo menos no es tan rotundo como Fraga ("un cero absoluto", evaluó el presidente de honor del PP). Pero lo mejor ha sido lo de la portavoz popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, que ya le va cogiendo el gustillo a los micrófonos y a su portavocía. Dijo que el resumen eran dos títulos de Gabriel García Márquez, retocados para la ocasión: Cien días de soledad y Crónica de una crisis anunciada. Y tanto se gustó en su respuesta, que la va repitiendo en distintos foros... Y tanto le gusta decirla, que una de las veces se equivocó y dijo Crisis de una crónica anunciada... Pobre crónica, qué culpa tendrá... Si es que no se puede tener sentido del humor en esto de la política...

¿Y yo qué pienso? Pues que hay que establecer cuanto antes un mecanismo aritmético válido (¿no iba a potenciar este Gobierno la investigación? Ya veo en las facultades a un experto sacando una fórmula matemática que compense las filias y las fobias políticas...), algo que nos acerque a la verdad. Si las notas son notable por parte del PSOE y muy deficiente por parte del PP, lo más normal es que nos movamos entre el aprobado alto y el bien, ¿no? Vaya, ya he provocado las iras de unos y otros, que pensarán que es una nota muy baja (socialistas) o muy alta (populares)... Lo que está claro es que pedirle opinión a un político se ha convertido ya en un ejercicio de fe, nunca en un intento de informar al personal. Y el caso es que me recorre un pensamiento por la cabeza, un pensamiento que, como poco, debe ser medio subversivo en los tiempos que corren: la política debía ser otra cosa, ¿no...?

2 comentarios:

C.C.Buxter dijo...

Quizá la pregunta sería, más bien: ¿ha hecho algo el gobierno en estos cien días? La respuesta sería como en el chiste de la chica mona que no habla: "¿pá qué, pá cagarla?" Estos han sido los cien días más tranquilos que haya podido tener nunca ningún gobierno, porque ha tenido una ¿oposición? más empeñada en oponerse a sí misma que en otra cosa. El gobierno ha dejado pasar el tiempo... y ya haremos cosas cuando la gente vuelva de vacaciones. La única aportación relevante ha sido la amenaza de la ministra Aído de acabar con el castellano (contra ella sí que habría que hacer un manifiesto...).

Bromas aparte, la nula autocrítica de los partidos políticos es lamentable, pero comprensible. Cuando alguno se descuelga y hace una mínima autocrítica o elogio al contrario (por ejemplo, Solbes y la buena herencia económica del PP), pasa a ser utilizado por el enemigo como arma arrojadiza contra su propio partido. Imagínate que sale Alonso y dice "Pufff, el gobierno no se lo ha currado demasiado, le pongo un cinco", o Soraya dice "Hay que reconocer que ZP lo hace de fábula"... no duraban ni una semana.

Reverendo Pohr dijo...

Las herramientas clásicas para evaluar son los INDICADORES, seleccionados anteriormente y que permitan, no solo una evaluación ex-post, sinó hacer también el seguimiento de lo que se lleva a cabo. A partir de los resultados y los posibles impactos, se hace la valoración. Suena algo complicado, ¿verdad?.

Ahora mismo muy poca gente puede valorar al gobierno porque lo único a evaluar es lo que nos llega desde los medios de comunicación (y cada uno a su manera y decidiendo cuáles son los Temas Estrella, como si fueran lo único). Leerse el BOE, cualquier boletín oficial o prensa especializada variada requieren demasiado esfuerzo. Así que, para facilitar la tarea, la valoración podría resumirse en una pregunta: ¿te gustan los sociatas (5-10) o los peperos (0-4)? El tema de decimal arriba, decimal abajo depende de la emisora de radio que escuches...