jueves, agosto 21, 2008

De la ilusión olímpica al asombro, pasando por la consternación

Llevo días pendiente del televisor, pendiente de los Juegos. Es la ilusión olímpica de cada cuatro años. Esa que me lleva a ver, en un mismo día, partidos de tenis de mesa, competiciones atléticas, combates de taekwondo, encuentros de balonmano o ejercicios de natación sincronizada. Ayer, esa ilusión se transformó en consternación cuando cerca de las cuatro de la tarde me enteré del accidente de Barajas. Las palabras no pueden explicar lo que se siente al ver algo así. Ni mucho menos cuando, por desgracia, toca vivirlo de cerca. No es mi caso y puedo dar gracias por ello. Nunca he tenido amigos o familiares en tragedias de esta magnitud, así que no voy a jugar a sabelotodo explicando lo que debe de ser eso. Pero duro tiene que ser. Durísimo. Un chasquido y, de repente, te has ido. O, si te has quedado, tu vida ha cambiado para siempre. Sólo se puede dar el pésame y seguir adelante.

La consternación no se va y el recuerdo de estas imágenes estará presente durante mucho tiempo, pero no pude evitar en las horas siguientes dar un paso más en mi estado de ánimo y pasar de esa consternación al asombro. Primero, asombro por la labor de los medios de comunicación. El afán por decir datos continuamente llevó a numerosos errores de todo tipo. Por ejemplo, el número de personas que había en el interior de ese maldito avión que tantas vidas ha destrozado, que osciló durante horas entre las 164 y las 177. La máxima debiera ser la cautela, pero en cambio se opta por el dato sin constrastar. Como casi siempre. Por eso se hablaba de una decena de muertos en un accidente que, desgracidamente, pintaba mucho peor (y me acordaba de aquel primer balance que se dio del 11-S en una cadena española: seis muertos). Durante horas, se habló de cuarenta muertos y menos de 50 heridos. Eso dejaba a más de ochenta personas en el limbo. Ni heridos ni fallecidos. Ni en el avión ni en los hospitales. No creo que contribuyera mucho a tranquilizar a quien tuviera alguien cercano en ese avión.

No me gusta el morbo, y creo que lo ha habido. Como casi siempre que hay una tragedia de grandes dimensiones. Veo programas que tienen un tono de comedia abordar esta cuestión como si fuera su cometido. Cualquiera se siente capacitado para ser periodista. Y eso deja al periodismo y a los periodistas de verdad a una altura bajísima. Tampoco contribuyó a tener una buena sensación profesional ese afán desmedido por sembrar el miedo al dar informaciones imposibles. No se pueden conocer hoy las causas del siniestro, y muchos se están aventurando a darlas. No se puede convertir cualquier problemilla técnico de un avión en la sospecha de un nuevo accidente de grandes proporciones, y se está haciendo. No se puede acusar a nadie sin tener pruebas de nada, y se está apuntando ya a muchos sitios. No entiendo por qué no hay cautela cuando tenemos tantas muertes sobre la mesa.

Y el asombro me lo han terminado de rematar los Juegos Olímpicos. El COI prohibió que la bandera española ondeara a media asta y que los atletas llevaran crespones negros (en marcha, nuestras chicas lo llevaron porque la prohibición llegó a sus oídos con la prueba ya comenzada). Puedo llegar a entender (entender no implica compartir, que conste), que el Comité Olímpico quiera permanecer ajeno a cuestiones políticas que puedan enturbiar las pruebas. Pero esa demostración de insensibilidad, cicatería e inhumanidad no se puede entender de ninguna de las maneras. Son gestos que no cuesta nada hacer, se agradecen mucho, y, en cambio, dejan una imagen deplorable si no se hacen. Patético, sencillamente patético, como también lo es la nula capacidad de algunos dirigentes españoles (¿verdad, señor secretario de Estado para el deporte?) para oponerse a esta estupidez.

11 comentarios:

C.C.Buxter dijo...

Yo me enteré alrededor de las tres del mediodía, y en ese momento simplemente se hablaba de que un avión "se había salido de pista" en Barajas. Pensaba que al aterrizar habrían tenido problemas, pero no que fuese algo como lo sucedido.

A veces uno puede parecer pesado, pero es que no llego a entender cómo gente que se dice periodista puede llegar a hacer ciertas cosas. Ya que hablas de morbo, hoy he visto por la mañana cómo entrevistaban a una mujer (con su bebé en brazos) que iba a coger un avión si tenía miedo de que puediese repetirse lo ocurrido ayer; luego, creo que en Telecinco, han "informado" que el vuelo de Spanair que hoy salía de Barajas a Gran Canaria, a la misma hora que el accidentado ayer, había salido sin ningún percance. ¡¡¡Qué esperaban!!! Por no hablar de los listillos de turno que especulan como quien no quiere la cosa sobre si ha sido un atentado...

Lo del COI es impresentable, pero parece que no es la primera vez. Ya lo habían solicitado Rusia (aunque en este caso es comprensible, porque la razón era la "liberación" de Georgia), Estados Unidos (fue asesinado un familiar de su equipo de voleibol) y creo que también Jamaica; como a estas cosas sólo se les da importancia cuando le pasa a uno, pues ellos se quedan tan anchos...

Mara dijo...

La verdad es q yo no lo entiendo. Yo creo que el luto no tiene nada que ver con nada político... vamos, digo yo!!

Anónimo dijo...

La verdad es que es un palo... es muy jodido y no hay mucho que hacer en temas así excepto sentir este sentimiento de empatía que nos abruma desde ayer... Lo del COI es una tradición, tampoco lo hicieron con los cientos de víctimas que ha habido por la guerra de Rusia contra Georgia... No lo hacen NUNCA y es denunciable pero son coherentes dentro de su gilipollez absoluta. Al igual que la Federación Española de Fútbol (y eso sí que es fuertísimo porque se trataba de un amistoso).

...En fin, menos mal que nuestros olímpicos sí saben homenajear a las víctimas y lo van a seguir haciendo.

...En cuanto al morbo, estamos con lo de siempre. Por eso yo prefiero seguirlo por radio, es más fácil caer en él a través de las imágenes. Cada vez son menos los periodistas que saben estar a la altura de las circunstancias.

Patricia dijo...

Morbo, has tocado la palabra que lleva rondándome desde ayer en todas y cada una de las informaciones que se daban por televisión. Cómo es posible que ante catástrofes como ésta se siga usando el morbo.
Esta tarde alucinaba viendo como sacaban en primer plano a una familiar de algún fallecido entrando prácticamente desmayada al hotel... y la prensa encima de ella con cámaras y micrófonos, y la tv retransmitiéndolo, y nosotros sentados en el sofá viéndolo como si se tratara de una película dramática ¡¡por favor, que es algo real!!. O cómo en uno de los programas televisivos de por la tarde anunciaban cada dos minutos que iban a mostrar un sms enviado por un hombre que iba en el avión a su mujer minutos antes de que todo ocurriera, así durante más de media hora. ¿Qué pretenden hacer? ¿Aprovechar todo ésto para ganar audiencia?
A la fuerza nos hacen insensibles... te cansas de tanta pantomima y tanto morbo cuando pasan estas cosas, desconectas la tv y acabas metiéndote en tu burbuja.

En fin... prefiero quedarme con la labor que han hecho los bomberos, la policía, la gente de a pie que fueron los primeros en llegar a socorrer, con los "chaquetas verdes" del aeropuerto apoyando a los familiares... eso es apoyo, no tratar de dar información por todos los medios aun sin contrastarla, generando más caos.

Roi dijo...

Lo has clavado Juan, un cero para el periodismo de este país, si es que a estas alturas se puede llamar así y no informadores sensacionalistas que es lo que realmente son. Vergonzoso, inaguantable, humillante, no se salva ninguna cadena pero es que a algunas habría incluso que denunciarlas. Estamos convirtiendo las noticias en un Gran Hermano con el único fin de ganar audiencia.

Me imagino a uno de los estúpidos estos que se ponen el micro recibiendo la información en directo de que uno de sus familiares también iba en el avión... Share del 90% en ese momento para ver como un imbécil traga su propia medicina... en fin... difícil camino el que has elegido pero bueno, habrá que luchar desde dentro todo lo que se pueda.

Ciao!

Casandra dijo...

Mira, has dicho algunas cosas que estuve a punto de escribir yo ayer, pero como ya me había cogido un buen disgusto con lo del accidente no quise seguir dándole vueltas. Estoy totalmente de acuerdo contigo en todo.
Al principio dijeron "un pequeño accidente con 2 muertos" y salía una columna de humo de tres pares de cojones, y ya decía mi padre: "Qué raro es que en un avión se maten sólo dos personas cuando hay un accidente". Debemos exigir más seriedad a la hora de informar y sobre todo que programas del corazón como uno cuyo nombre no quiero mencionar pero que "se está pasando" se dediquen a hablar también sobre tragedias: parece que se lo toman a coña y es lo que transmiten al público, buscan la sangre y el morbo a cuelquier precio y deshumanizan a los telespectadores. Una cosa es un programa del corazón (no entro en si me parecen bien o mal) y otra un informativo. Pero aquí se mezclan churras con merinas y así vamos.
Tienes razón al decir que no se pueden aventuras causas inventadas, sería faltar el respeto debido a las víctimas, a la tripulación de ese avión y a la gente que trabaja todos los días en los angares de nuestros aeropuertos. Primero hay que esperar a saber: sin conocimiento no se puede opinar sobre las cosas (y a veces con él casi que tampoco).
En cuanto a lo del COI me hirvió la sangre cuando lo escuché y opino que la delegación española debía haber lucido los crespones dijera el COI lo que dijera, y si nos mandan a paseo recogemos nuestros bártulos y nos vamos, y que se vayan a tomar viento. Porque no es justo que en unos juegos donde un deportista se esfuerza por su país no pueda declarar su dolor en un día como el de ayer. Se escudan en que son las normas, pero las normas las hacen las personas y no hay norma que no posea una excepción para confirmarla. Fueron crueles y nuestro país un mediomierda por no imponerse y sacar las uñas cuando tocaba. Pero como ahora está mal visto tener sentimiento de nación así vamos, nadie se atreve a abrir la boca.
¡Un beso y buen post, muy interesante!

Casandra dijo...

Quería decir 2aventuraR causas". XD

MoN dijo...

Lo del COI a mi es que ya no me parece normal.

No tiene nada que ver con cuestiones politicas si no con humanidad.

Es terriblemente indignante.

Un beso y gracias por pasarte =)

Maty dijo...

¡Totalmente de acuerdo contigo Juan! Pero la verdad es que en casos así siempre pasa lo mismo. Estoy hasta el gorro de que persigan a los familiares buscando desmayos, lágrimas y dolor. Todos podemos imaginarnos cómo lo están pasando, no es necesario verlo directamente. El otro día salían una madre con sus tres niñas, una de ellas debía tener sobre 15 años y la pobre tirada en el suelo llorando, ¡por favor! Un poco de respeto...
Ah! Y lo de 'Está pasando' es que ya no tiene nombre... Eso sí que es vivir del morbo. Aparte los reporteros ahí, de pesados, preguntando todo el rato, dando el pésame. Patético.
Y lo del COI son ganas de armar polémica. ¿Qué mas les daba?

Anónimo dijo...

la final de baloncesto ha sido lo mejor que he visto en una cancha de baloncesto.

Juan Rodríguez Millán dijo...

Luisa, gracias por pasarte por aquí. Más personal es este, los otros son más especializados.

C.C.Buxter, esta profesión cada vez está más devualuada. Reconozco que ésta ves me esperaba la caída desenfrenada en el morbo, pero sigue doliendo...

Mara, pues no, pero forma parte de unas normas anticuadas e incomprensibles, que se aplican a rajatabla en lugar de hacerlo con humanidad. En fin, un desastre...

Pilix, totalmente de acuerdo. Cada vez hay menos periodistas a la altura. Me duele escribirlo, pero es verdad.

Sonrisa, lo del SMS me ha dejado de piedra. Y eso que estaba prevenido para las barbaridades y morbosidades de estos días, pero eso es tremendo...

Roi, creo que das en el clavo: algunas cosas habría que denunciarlas. ¿Alguien escucharía...? Seguiremos dando el callo, aunque sea desde un reducto tan reducido como un blog...

Casandra, al final parece que casi todos los espectadores aquel día reaccionamos con la misma sorpresa a este mercadeo de morbo, pero eso no impedirá que se vuelva a reproducir en la próxima desgracia. Y lo del COI, tristísimo, claro...

Mon, es cierto, son cuestiones humanas. Pero en lo más fácil es donde más se suele fallar...

Maty, yo creo que lo mejor es no ver nada, de verdad. Yo es la medicina que me he aplicado. Porque si veo cosas como las que me cuentas, me enciendo...

Helen, hay que quedarse con su tristeza y con los que se lanzaron a ponerse un crespón o un brazalete negro. A ellos les pareció más importante el homenaje que las normas.

Anónimo, pues sí, fue enorme. Uno de esos partidos que crean afición a un deporte.