miércoles, octubre 12, 2011

El peligroso periodismo que le gusta al PP

Gracias a apasionantes debates, sé que mi creencia de que la derecha domina la información en este país no la comparte todo el mundo (aunque fue desde los medios de derechas desde donde se montó la única conspiración que ha habido en este país, con o sin razón, para sacar a un presidente del Gobierno, a Felipe González). Sin embargo, es algo de lo que sigo convencido. Y más aún. Entiendo que la derecha, reflejado a través del PP, maneja un peligroso modelo de periodismo que me asusta bastante. Sé que todos los que llegan al poder colocan a los suyos en los medios de comunicación. Sé que todos intentan que sus afines les hagan propaganda. Sé que las llamadas se hacen a quien se puede influenciar. Pero, aún así, creo que hay mucho menos pudor en las filas del PP, y hay muchos casos que lo evidencian. El de Ana Pastor es de libro. María Dolores de Cospedal se enfrentó a ella en directo. El portavoz del PP en la Comisión de Control de RTVE, Ramón Moreno, ya insinuó su despido hace unos meses en cuanto ellos llegaran al poder. Y ahora el secretario de Presidencia de las Cortes Valencias, Ángel Minguez, disfruta haciendo chistes a costa de ese mismo despido después de las elecciones del 20-N.

Aquí hay un claro aviso a navegantes. El que no se pliegue a las exigencias del poder, se va a la calle. Por supuesto, nadie lo dirá abiertamente, nadie pondrá rostro a una amenaza así, pero es evidente lo que va a suceder después de las elecciones generales del próximo mes si hay un cambio de Gobierno (como si alguien lo dudara ya a estas alturas...). Y RTVE va a salir perdiendo. Muchísimo. Manipulación hay en todos los medios públicos, pero los ejemplos más sonados, más rastreros y más evidentes se dan con el PP en el poder. No hará falta recordar otra vez (o quizá sí) que la única condena por manipulación a los servicios informativos del Ente Público llegó con José María Aznar en La Moncloa y Alfredo Urdaci como director de Informativos (con aquel vergonzoso "ce, ce, o, o"). En Telemadrid, entre otras cosas, se colocan anagramas de ETA sobre los rostros del presidente del Gobierno y del ministro del Interior. En Canal 9 no se informó nunca del caso Gürtel. Y una de las primeras decisiones de Cospedal cuando se convirtió en presidenta autonómica, decisión en la que no hay crisis ni recorte posible, fue colocar a Ignacio Villa al frente de la Televisión de Castilla-La Mancha.

En mi experiencia profesional, las llamadas que recibí (o que recibieron por encima de mí para que me las hicieran llegar) fueron siempre desde las esferas de poder del PP. No fueron muchas, pero todas y cada una de ellas tenían como origen un responsable de prensa de algún lugar gobernado por los populares. Ya es casualidad. Cuando yo aterricé en la redacción, quienes llevaban allí un tiempo me contaron que fue espectacular el incremento de faxes (sí, amigos, en una época no tan lejana la comunicación de documentos se hacía vía fax) cuando el PP llegó al Gobierno central en 1996, porque no hay mejor propaganda que el bombardeo constante. Cuando cojo el transporte público en Madrid no dejo de ver carteles que me dicen que el Metro vuela o que somos la suma de todos, pero eso sucede (y se paga con dinero público) cuando hay recortes en la enseñanza. La publicidad, la propaganda y la información no decae, pase lo que pase en el mundo. Eso que no falte. Y lo que no caerá son los elevadísimos sueldos de quienes controlan la televisión pública, porque hay que tener contentos a quienes dirigen este cotarro.

Por supuesto, el PP tendría mucho que decir en este asunto. Y lo dirá, no me cabe duda. Lo dirá con hechos en cuanto llegue a La Moncloa. RTVE va a cambiar. Y mucho. Y puede que entonces algunos añoren la época que estamos viviendo, en la que, por mucho que se empeñen desde el PP con continuas denuncias, algunas rocambolescas, la televisión pública estatal vive los momentos de mayor libertad de su historia. Eso va a cambiar. Me produce cierta lástima que la profesión no sea una ante ataques como éstos. Parece que hay que ser de izquierdas para censurar a un dirigente popular que se mofa en público de que su partido va a echar a una periodista de la televisión pública porque no comulga con sus intereses o sus opiniones (¿no dice esa Constitución que tanto defienden que tenemos derecho a "expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones"? ¿Que el ejercicio de ese derecho "no puede restringirse mediante ningún tipo de censura previa"?). Siento una enorme sensación de desamparo, siento que el periodismo está plegado al poder, siento que hay demasiados profesionales que aceptan estas cláusulas como para que protestar sirva de algo. Pero seguiré protestando. Porque creo en lo que digo y en lo que pienso. Y pienso que, cuando tiene el poder, el PP pone en peligro el ejercicio del periodismo libre.

6 comentarios:

José Vte. dijo...

¿Pero tu te das cuenta de que todas estas movidas fascistoides siempre tienen algún punto de partida en la Comunidad Valenciana?.
Lo digo, claro está por el tal Mínguez. Por supuesto que para este democrático señor, instigador de purgas informativas, y para Cospedal y otros, el modelo a seguir es el de Canal 9 o el de Urdaci en la época de Aznar. Es con lo que se sienten a gusto, con el control absoluto de las noticias y que sólamente existan las que a ellos les interesa. Pruebas de ello hay a cientos en todos estos años de gobierno autonómico del PP en la C. Valenciana.

Se acercan tiempos oscuros y los periodistas vais a ser de los primeros en lamentar lo que está a punto de llegar. Al tiempo

Saludos

Trilce dijo...

Hombre, ya ha salido la Comunidad Valenciana... No creo que sea solo culpa del modelo valenciano. Si otras comunidades lo imitan es porque el «germen» está en todas.

C.C.Buxter dijo...

No te preocupes Juan, gracias a la TDT podremos acceder a otros informativos más plurales: Intereconomía, Veo TV, 13 TV, CNN + (ah no, espera...). Y si lo que nos interesan no son las noticias, siempre podemos ver a Piqueras.

José Vte. dijo...

Ya ha salido la Comunidad Valenciana, si, porque es posible que tu no sepas lo que es sufrir esa manipulación y esa censura todos los días desde hace tantos años y encima pagándolo con mis impuesto en detrimento de otras necesidades urgentes de las que carecemos.
¡O quizás si que lo sepas!

Lo curioso es que el "germen" ese del que hablas se propaga muy rápidamente en las cumunidades que gobierna el PP, incluso en las de nuevo cuño es lo primero que implantan. ¡Por algo será!

Juan Rodríguez Millán dijo...

José Vicente, en temas como la comunicación y el periodismo la verdad es que estamos en tiempos oscuros desde hace tiempo, pero estoy de acuerdo contigo, y por eso he escrito lo que he escrito, en que van a empeorar. Ya veremos...

Trilce, está claro que el germen está demasiado extendido, pero entiendo a José Vicente, porque es verdad que hay demasiada coincidencia últimamente en la Comunidad Valenciana...

C.C.Buxter, me encanta tu nota de ironía, je, je, je... Y se te olvidaba Hilario Pino.

Anónimo dijo...

Para doce millones de españoles (esos dicen que serán los votantes que refrendarán “la caverna al poder”), la España que retratas es la que quieren, y tantos millones de votantes son muchísimos, tantos que seguramente hoy en el metro me he cruzado con varios de ellos.
Este mundo no tiene arreglo.