viernes, abril 15, 2011

Libertad de prensa

Hay formas y formas de entender la libertad de prensa. Para mí, la libertad de prensa supone una independencia de los medios de comunicación con respecto al poder. Exige que un profesional que tenga una noticia contrastada e interesante la pueda publicar sin temor a represalias, ni internas en su empresa ni externas de esos mismos poderes. Permite al periodista profesional exponer opiniones del signo que sea, siempre y cuando no sean irrespetuosas o se basen en mentiras o intereses partidarios. Esa libertad de prensa en la que creo está en peligro de extinción (¿extinta ya?) en los grandes medios de comunicación. Internet vino al rescate y con herramientas como los blogs los periodistas pueden (podemos) seguir diciendo lo que pensamos, contribuyendo a generar debate y a difundir hechos y opiniones que de otra forma no verían la luz. Evidentemente, hecha la ley está hecha la trampa y creado el instrumento de comunicación éste se puede contaminar igualmente con ese virus que cerca a la libertad de prensa, pero al menos tenemos una oportunidad más.

La libertad de prensa, por ejemplo, me permite lamentar la terrible paradoja de estos días. Carlos Iturgaiz es el protagonista de un libro escrito por Chelo Aparicio. A la presentación acuden José María Aznar, Mariano Rajoy y Jaime Mayor Oreja. La presentación tiene lugar en la Asociación de la Prensa de Madrid. Allí, en la supuesta casa de los periodistas, sólo Iturgaiz respondió a las preguntas de esos mismos periodistas. Hay temas sobre la mesa que un candidato a la presidencia del Gobierno, un ex presidente del Gobierno y un ex ministro del Interior y europarlamentario podrían contestar. Pero no las contestan. Sólo hay silencio. Fijaos si hay libertad en este país, que el gremio de periodistas acoge en su casa a gente que habitualmente no responde a sus preguntas. Al menos no a las de todos. Un episodio por desgracia no lo suficientemente recordado de Aznar fue cómo se achantó ante Luis del Olmo cuando éste, en directo, le pidió que le concediera una entrevista a su compañero y rival (por trabajar en otra emisora) Iñaki Gabilondo. Esa entrevista, obviamente, jamás se produjo y no precisamente porque Gabilondo no la pidiera.

Es un mal que aqueja a demasiados políticos, éste de no responder preguntas de la prensa, de limitarse a leer un papelito, hacer una declaración prefabricada o mandar un comunicado de prensa. Pero el PP es especial en esto desde hace demasiado tiempo y en todos sus centros de poder. No creo que todos sean iguales en este sentido, aunque no por eso los demás sean buenos manejando ese al parecer complicado concepto de la libertad de prensa. Sabido es que con Aznar en La Moncloa y Alfredo Urdaci como director de informativos, TVE recibió su primera y única condena por manipulación informativa. Sabido es que Telemadrid ha sido repetidamente denunciada e investigada por manipulación, y que no tiene rubor alguno en colocar el anagrama de ETA sobre el rostro del presidente del Gobierno porque conoce la impunidad absoluta de acciones tan despreciables como esa. Y esta misma semana hemos visto que, aunque ya la han retirado, el PP valenciano presentó una denuncia contra cuatro emisoras de televisión (por descontado, Canal 9 no es una de ellas) porque emitieron una pieza detallando que Francisco Camps se presenta a las elecciones autonómicas con once candidatos implicados en casos de corrupción.

Esa es la libertad, y no sólo de prensa, que se estila en la Comunidad Valenciana. La que llevó el pasado mes a ese mismo partido a pedir, afortunadamente sin éxito, la suspensión de una manifestación en contra de la corrupción. La que hace un año motivó que la Diputación Valenciana censurara la parte dedicada al caso Gürtel que integraba una exposición de fotografía en el Museu Valencià de la Il-lustració i la Modernitat (se retiraron diez fotografías un día después de que la exposición abriera sus puertas). La que hace de Francisco Camps un presidente que jamás se presta a una rueda de prensa abierta en la que los profesionales de la comunicación puedan cuestionarle sobre cualquier asunto que consideren de interés. Tenemos políticos que sólo hablan de lo que ellos quieren, cuando ellos quieren y con quien ellos quieren. Y, paradojas de la vida, la Asociación de la Prensa de Madrid les abre sus puertas para ello. Será cuestión de asumir que la libertad de prensa se puede entender de muchas maneras y que la exigencia de atender a un periodista no la tienen tan clara como yo, ingenuo de mí, personajes que ostentan o han ostentado cargos públicos.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo sinceramente que el futuro del periodismo está en internet y en la capacidad de los internautas para seleccionar información. En blogs como el tuyo y como el de otros que dais las noticias que queréis porque algo os mueve a ello. El problema es que de eso no se come, y en el momento en el que pongas a un señor detrás soltando mortadelos se va a volver a lo de siempre.

Trilce dijo...

No debería haber salido como anónimo ese comentario, era yo.

Margot dijo...

De todas formas, lo curioso es que los desplantes periodísticos que se permiten al PP no son ni, por lo más remoto, los que se toleran al PSOE. Dicho esto, lo que deberían hacer los periodistas cuando un político se niegue a contestar a una pregunta de interés público que formule cualquier compañero, es retirarse en bloque. En cuanto esa unión exista, las cosas cambiarían. O quizá peco de optimista?

Claire dijo...

Deberían de tener la obligación de responder a todos los medios por igual y más si ocupan cargos públicos.¿de qué tienen miedo?... tienen una responsabilidad para con los ciudadanos que queremos saber, y han de dar la cara y dar explicaciones y asumir sus equivocaciones.
Me ha parecido un post super interesantes.
Besos y feliz tarde de domingo.

José Vte. dijo...

Tú, porque eres periodista, y de los buenos, sobre todo de los honrados, como bien demuestras con tus continuas denuncias sobre el asunto. Pero tiene guasa que sean los blogs, en la mayor parte de los casos, escritos por neófitos, los que, como bien dices, estén revolucionando el mundo de la información.
Los periodistas deben de vivir de su trabajo, pero sobre todo los ciudadanos tenemos derecho a una información veraz y de primera mano, sin cortapisas ni manipulaciones. Desgraciadamente, todo lo que cuentas en tu escrito es verdad. Recuerdo perfectaente los tiempos de Urdazi y su vergonzasa y continua manipulación informativa. Y al vivir en la C. Valenciana, estoy al dia de cuanto sucede aquí. Camps nunca admite preguntas en sus escasas comparecencias ante los medios. Canal 9 es heredera directa de aquella televisión de Aznar.
El suceso que cuentas de la denuncia del PP a las televisiones por la noticia de las listas, es por decirlo suavemente, "buñueliano". Hasta el PP a nivel nacional les tuvo que llamar la atención.
Y es que están tan acostumbrados a manejar, a hacer y deshacer a su antojo, que el que les saquen los colores les sacan de sus casillas, y rapidamente se ponen en eviencia.

Es la cruz que tenemos que vivir todos los dias en Valencia, y desgraciadamente lo que aun nos queda por aguantar.

Saludos

C.C.Buxter dijo...

Algo que no suele ser tenido en cuenta es que la libertad de prensa no solo es un derecho, principalmente de los periodistas, a difundir libremente una información veraz, sino que también es un derecho que tenemos todos los ciudadanos. Los que tanto dicen defender la Constitución deberían saberlo. Solo con una prensa libre y una ciudadanía informada puede existir una auténtica democracia, entendiendo por tal algo más que el mero hecho de votar cada cuatro años.

El viernes, los periodistas deportivos se retiraron de la rueda de prensa de Mourinho porque éste se negó a contestar preguntas. Ojalá existiese el mismo coraje para hacer eso con un político.

Juan Rodríguez Millán dijo...

Trilce, estoy de acuerdo contigo, por desgracia en las dos cosas. Y digo por desgracia porque, obviamente, no tener ingresos por ejercer tu profesión desmotiva y te quita tiempo para ejercerla, porque de algo hay que comer.

Margot, llevo años clamando por eso. Yo no voy a la sede de un partido o institución a verle la cara a un señor que lee un papel. Si eso es lo que quiere, que me lo mande al correo electrónico y todos tardamos menos. Pero yo no publicaría ni eso. O al menos titularía siempre por el hecho de que no se sometan al control de la prensa. Pecas de optimista, el forofismo lo hace imposible.

Claire, sobre todo si ocupan cargos públicos, tienes toda la razón. Creo que el miedo que tienen parte de que conocen su propia incapacidad, temen liarla y ser el objeto arradizo del rival. Estoy convencido de ello.

José Vicente, me alegro de que veas esa doble vertiente, la necesidad de que el periodista pueda hacer su trabajo y el derecho que tenemos todos como ciudadanos a tener un periodismo veraz, independiente y no vendido al poder. Más de una vez te lo he dicho, pero es que lo de la Comunidad Valenciana es asombroso...

C.C.Buxter, efectivamente, esa doble vertiente es vital y, lamentablemente, la gente pasa de ella. La gente y los políticos. Ya sabes que la Constitución sirve sólo para lo que interesa al político de turno. El plante a Mourinho me pareció fantástico. Pero es una islita ya olvidada en un inmenso océano. Tristemente, nadie se atrevería a hacerle eso a un dirigente político.