jueves, enero 05, 2012

¿Por qué han votado los españoles a Mariano Rajoy?

Las primeras medidas del Gobierno y la encuesta del CIS cuyos resultados se han conocido hoy me llevan a preguntarme por qué han votado los españoles a Mariano Rajoy para que sea presidente del Gobierno. No pretendo con esa pregunta, ni con las respuestas descartables que añadiré a continuación, juzgar la acción de Rajoy en La Moncloa, líbrenme los poderes superiores de lanzar sentencias definitivas sobre un trabajo de apenas quince días, que son los que lleva sentado en la silla del poder. Sé que en esta polarizada sociedad, en la que parece que casi todos tenemos una capacidad innata de ofendernos por todo, habrá quien interprete esto como un ataque injustificado y muy tempranero. Pero es que en ese breve espacio de tiempo se me han generado tantas dudas que me hace preguntarme por qué está efectivamente sentado en el Palacio de la Moncloa. Veamos.

Quiero suponer que los españoles no le han elegido por "llamar al pan, pan y al vino, vino", como dijo en la investidura, porque tiene un registro bastante poco esperanzador en el tiempo de hacer lo contrario de lo que dice y promete. No iba a subir impuestos porque sería contraproducente para la economía española en una situación como la actual. Lo dijo como jefe de la oposición a lo largo de toda la legislatura pasada. Lo dijo en la campaña electoral. Lo dijo incluso en el debate de investidura. Nada menos. ¿Y qué es lo que aprueba en su primer Consejo de Ministros? Una subida de impuestos. No valoro si era necesaria o no, seguramente lo sea, pero sí valoro el temerario compromiso. También se comprometió a actualizar las pensiones y a que los pensionistas no perdieran poder adquisitivo. Lo primero lo ha hecho, sí, pero un millón de ellos perderá poder adquisitivo con la subida de impuestos. Hecha la ley, hecha la trampa. Yo escuché a bastantes votantes y periodistas que no votarían a Rubalcaba por mentiroso. ¿Por qué votaron a Rajoy? ¿O qué piensan ahora de esa razón de su voto?

Tampoco creo probable que haya muchos españoles que hayan votado a Rajoy por su facilidad para calmar a la gente con sus explicaciones. Más que nada porque esas explicaciones no se producen. Soraya Sáenz de Santamaría insiste una y otra vez en que estamos ante una situación extraordinaria, de excepción, dificilísima. ¿Y dónde está el presidente del Gobierno? Me lo preguntaba cuando era electo, y no apareció. Me lo pregunto aún más cuando ya está nombrado. Situaciones excepcionales requieren explicaciones excepcionales. Y si el presidente del Gobierno no aparece, malo. Con la prensa no ha hablado más que para leer la lista de sus ministros e ignorar una pregunta sobre el tema. En el Parlamento no hablará hasta finales de enero, 40 días después de tomar posesión del cargo. En La Moncloa todavía no lo ha hecho pese a la importancia de sus medidas y ha delegado en su vicepresidenta, que ni siquiera sabe si Rajoy va a hablar algún día y así lo ha dicho. Es obvio que Rajoy no ha recibido votos por lo bien que explica sus decisiones.

A tenor de lo que dice el CIS, parece evidente que se votó a Rajoy para echar al PSOE. Eso se deja ver con que el 88,1 por ciento cree que la crisis influyó mucho o bastante en el resultado (aunque luego la gente se esconde y el 34,2 por ciento dice que no influyó para nada en su propio voto; ya sabéis, son los demás, siempre son los demás...) y en que sobre 10 den un 7,82 al grado de responsabilidad que tiene el Gobierno en la situación actual (aunque, vaya, qué curioso, le da menos responsabilidad que a los bancos, a la situación económica internacional e incluso que al Banco de España). Pero tampoco parece que haya mucha confianza en que Rajoy vaya a solucionar desde el Gobierno la crisis, porque un 70,4 por ciento cree que va a empeorar más. ¿No le han votado entonces para que solucione esto?

Pasan los días, se suceden los acontecimientos. Y yo me mantengo en mis dudas. No profundizaré en las que me generan las medidas económicas adoptadas, porque no puedo argumentar con firmeza ni conocimientos el temor a que no generen empleo, que es lo que más preocupa a los españoles, según confirma una vez más el CIS. Pero sí que se puede decir que todavía no soy capaz de entender por qué han votado los españoles a Rajoy más allá del cambio por el cambio, y sin negar que fuera necesario porque eso es otra discusión. Rajoy, desde luego, se está afanando en incrementar mis dudas a este respecto. Y sólo lleva quince días como presidente.

3 comentarios:

El Impenitente dijo...

Dicen que economista es aquel que sabe explicar perfectamente en qué se equivocó en sus previsiones. Político es aquel que sabe explicar perfectamente por qué no cumple ninguna de sus promesas.

A mí no me sorprende nada. ¿Quien manda en el Valencia C.F.? Bancaja (o Bankia). ¿Por qué? Porque le deben lo que no está en los escritos. En España ahora mismo mandan los acreedores. Cuando hayan cobrado, a partir de entonces ya veremos. ¿Influyó la crisis en el resultado electoral? Desde luego. Peor que Zapatero no se puede gestionar la crisis. ¿Lo va a resolver Rajoy? Por lo pronto no se ha llevado ningún valenciano al gobierno, lo cual es buena noticia.

Este año va a ser muy malo. No hay un duro y sobra mucha gente. Hay que hacer limpieza en todos los niveles (el otro día estuve en el aeropuerto de Reús. Está parado. A partir de marzo volverá Ryanair puesto que la Generalitat se ha bajado los pantalones y pagará el impuesto revolucionario. Se construyen aeropuertos inútiles donde hay que pagar para que funcionen mínimamente. No se puede gobernar peor. Y los mismos políticos inútiles que nos han llevado aquí nos han de sacar de aquí. Tal y como voy escribiendo me voy acercando más a los del 15-M). Luego, pues ya veremos.

José Vte. dijo...

Es que en realidad no se ha votado a (OO), se ha votado contra (PSOE), la prueba es que Rajoy sólo ha obtenido 400.000 votos más que en las anteriores elecciones, y eso le ha llevado a sacar más de una tercera parte que en aquella ocasión. Hay mucho truco, la gente en realidad no confía nada en este señor.

Pero coincido contigo en lo absurdo muchas veces de las votaciones. El Impenitente habla de que no hay políticos valencianos en el gobierno.
Pero es verdad que en la anteriores elecciones autonómicas y municipales han arrasado aquí en Valencia. ¿Como ha sido posible? independientemente de que Alarte y su séquito son un atajo de inútiles. ¿Como un gobierno autonómico que es el modelo a no seguir en cuanto a corrupción, endeudamiento, tasa de paro, despilfarro, que tiene a su anterior presidente, y gran gestor de todo lo dicho, en el banquillo por presunto chorizo, que han desviado fondos y dinero, presuntamente a todo tipo de amigos y gansters, que se ha llenado de grandes eventos inútiles y que unicamente han generado y siguen generando más corrupción endeudamiento y paro sin que aporten nada positivo para el bienestar del pueblo, que también tiene intereses en otro caso de corrupción como el de Urdangarín, faltaría más, que incluso ahora con la que está callendo, y en periodo de recortes, se permita que en el desquiciado y vacío aeropuerto de Castellón, se coloque un mastodonte horrible para ensalzar a otro mastodonte de carne y hueso y que ha costado 300.000€?.

Y paro de contar porque podría llenarte el blog de ejemplos, ya lo sabes bien.
¿Como es posible, decía que encima los valencianos voten a esa catarba de políticos para que les vuelvan a representar?
Si a ZP se le castiga por la mitad de todo eso ?que pasa aquí?, ¿donde está el sentio común?

Para terminar, Rajý dijo en su momento que la manera de actuar de Camps y la C. Valenciana era la que el ejemplo a seguir (también lo dijo de Matas) y que con Camps estaría siempre, en cualquier lado y lugar.
Justo es lo que ha ehecho, tomar su ejemplo y empezar manipulando y mintiendo.

Y ya me callo que me lanzo y no paro, jejeje.

Un abrazo

Juan Rodríguez Millán dijo...

Impenitente, pues así nos va con esas definiciones tan peligrosamente reales... Pues veremos, veremos...

José Vicente, sí, estoy muy de acuerdo con esa lectura que, creo, se ha hecho poco después de las elecciones. Lánzate cuanto quieras, ya sabes que yo estoy encantado de leerte, siempre se aprende de los puntos de vista de los demás...